Artículo facilitado por Aktios

Lo ‘digital’ se ha posicionado como el más poderoso agente de cambio conocido, transformando a un ritmo acelerado nuestra sociedad desde lo más profundo y esencial. Pero la tecnología no es neutral, y no siempre se emplea de modo juicioso e inclusivo. En este contexto, el concepto de confianza digital emerge como piedra angular para la construcción de nuestro futuro común.

El pasado 6 de febrero Foment del Treball organizaba la jornada “Ciberseguretat per a no hackers”, impartida por Aktios, en la que reflexionábamos acerca de cómo las organizaciones que cultivan la confianza en sus interacciones digitales están mejor posicionadas para establecer relaciones duraderas con sus clientes, diferenciarse de la competencia e impulsar un crecimiento sostenible a largo plazo.

En una época marcada por las amenazas cibernéticas, desde las brechas de información hasta los miedos a los posibles efectos colaterales del despliegue de la inteligencia artificial, afianzar la fiabilidad, la seguridad y la transparencia (pilares de la confianza) es mucho más que la necesidad de una empresa para garantizar su subsistencia: es un imperativo para todo nuestro tejido social y organizativo, del que todos somos corresponsables, si queremos construir un futuro más sostenible, inclusivo y equitativo.

En el mundo somos ya 5.35 billones de personas on-line; pero, justo cuando se acelera la dependencia de las redes y tecnologías digitales, estas amenazas, y muy particularmente los ciberataques, están erosionando la confianza a una escala y un ritmo sin precedentes. Invertir esta tendencia implica una adaptación proactiva: al dar prioridad a las iniciativas de ciberseguridad, las empresas no solo salvaguardan sus propios intereses, sino que también contribuyen al objetivo social más amplio de fomentar un ecosistema digital seguro y digno de confianza.

Todo un reto para las organizaciones que no cuentan con los medios o las personas adecuadas, destinatarias de esta jornada, con las que, en nuestro empeño por divulgar la cultura de seguridad, compartimos cómo diseñar desde cero un plan director de seguridad: una estrategia eficaz, realista y viable en costes; con una visión holística que abarca la tecnología, los procesos y las personas; y una implementación eficiente de medidas de protección para inculcar la concienciación, la responsabilidad y el compromiso con la mejora continua hasta integrar la ciberseguridad en su ADN.